Muerte de la luz

"Esto no es Avalón, t'Larien. Y hoy no es ayer. Este es un mundo agonizante, un mundo sin códigos. Por tanto cada uno de nosotros tiene que aferrarse al código que conoce, sea cual fuere."

 

 

 

Ficha técnica:
- Título: Muerte de la luz
- Título original: Dying of the Light
- Autor: George R. R. Martin
- Saga: ----
- Editorial: Gigamesh
- Nº páginas: 304
- Género: Ciencia Ficción
- ISBN: 9788496208940

Sinopsis:
Una historia de amor con las estrellas como telón de fondo. Worlorn, durante su esplendor, albergó el fastuoso Festival de los Mundos Exteriores; ahora es un planeta moribundo que se aleja irremediablemente de la Rueda de Fuego para sumirse en una noche sin fin. A él viaja Dirk t'Larien con la esperanza de reencontrar el amor de Gwen Delvano y expiar errores del pasado; pero en su lugar hallará a Gwen unida por jade-y-plata a Jann Vikary y a su teyn Garse Janacek, en un vínculo incomprensible de amor y de odio, tan terrible y a la vez tan grandioso como el fin inevitable de Worlorn.

Personajes principales:

Dirk: Dirk t'Larien, el protagonista de esta historia. Es un humano que vive en un mundo civilizado, ha acudido a la universidad y está enamorado perdidamente de Gwen. No es hábil con las armas y viaja a Worlorn con el propósito de reconquistarla.

Gwen: es una humana que tuvo una relación con Dirk. Es bióloga, y aprovecha que Worlorn está poblado de distintos seres vivos para investigar. Ahora está unida por jade-y-plata a Jann, aunque no es lo que esperaba.

Jann: Janntony Riv Lobo alto-Jadehierro Vikary, o Jann Vikary, es un kavalar del Clan Jadehierro. Es un kavalar distinto a los demás, es progresista y al haber estudiado cree que hay que deshacerse de las viejas costumbres. Es alto y fuerte, y tiene un aura a grandeza pero también a melancolía.

Garse: el teyn de Jann. Es un joven kavalar unido a Jann, impulsivo y feroz, aún así es fiel a los suyos.
Arkin Ruark: un biólogo kimdissi que trabaja con Gwen. Es taimado y astuto, y odia a los kavalares.  

Los Braith: miembros del clan Braith que están en Worlorn. Son los que más están arraigados en las costumbres, y eso provoca conflictos.

Opinión personal:

Muerte de la luz es la primera novela de George R. R. Martin, y ya desde entonces era capaz de crear historias completas, que transmiten sentimientos y te emocionan al leerlas. En concreto, este libro es de ciencia ficción uno de los tres géneros favoritos de Martin (ciencia ficción, fantasía y terror). Pero no es una ciencia ficción al uso, es una crepuscular, eso es lo que emana este libro. Un constante sentimiento de melancolía, que encaja muy bien con la trama amorosa.  

Nos situamos en Worlorn, un planeta del Confín. Era un planeta cuya órbita se calculó que coincidiría con el Gordo Satanás y los demás soles, unas superestrellas. Durante 88 años Worlorn, un planeta inhóspito, será habitable. Y esto lo aprovechan los planeta de alrededor. Montan el Festival de los Mundos Exteriores, donde cada planeta construyó una ciudad y llevó gente, fauna y flora. Pero Worlorn continúa en su orbita, y se acerca el final de la luz del Gordo Satanás. Worlorn ha quedado semiabandonado, es un mundo que muere lentamente. Un planeta que anochece poco a poco. Solo quedan vestigios de tiempos mejores, y un extraño entorno creado por la combinación de distintos planetas.

Era la luz, comprendió Dirk después de un rato. La luz brumosa que el cielo irradiaba con mezquindad, el vago fulgor rojo que constituía el día de Worlorn. Esta era una selva crepuscular. En la lentitud del tiempo, en aquel otoño excesivamente prolongado, agonizaba.

En específico interactuamos con la cultura kavalar. Alto Kavalaan es un mundo del Confín, primitivo hasta hace nada. Basado en una sociedad de clanes, machista y opresora, donde solo los más fuertes merecen vivir. En la actualidad hay cuatro clanes grandes. Los clanes se estructuran de la siguiente manera: los hombres cazan y las mujeres (eyn-kethi) son compartidas por el clan. Dentro de los hombres, estos se agrupan por dúos, uniéndose uno a otro de por vida, son llamados teyn. El hombre puede tener una betheyni, una esposa-esclava, que comparte con su teyn. Son propiedad del hombre. Estas uniones se crean mediante brazaletes, divididos según su material. Antes, los hombres solían cazar a los no-humanos. Suelen realizar duelos. La primera vez que vi este sistema social, me quedé horrorizado. Luego, Martin te explica mediante Jann la historia de este planeta, obligado por las circunstancias a este modo de vida. Es un mundo brutal y cruel, sobre todo si eres mujer.

Los personajes son muy buenos, tal vez no muy profundos psicológicamente debido a que solo son unas trescientas páginas. Cada uno tiene una función, y lo más interesante son las relaciones entre ellos. La forma en la que en un mundo deshabitado, un grupo muy dispar convive, y lo que se debe hacer para sobrevivir. Tengo que resaltar a Jann como uno de los mejores personajes, junto a Dirk.
La trama es muy atrayente, solo la sinopsis ya te engancha. Es verdad que en algunos momentos no sabía a dónde iba a llevar la historia, pero exceptuando eso, la novela mantiene un buen ritmo, ideal para la trama. La edición es brillante, con una portada magnífica y que va a juego con otros libros de Gigamesh.
En resumen, Muerte de la luz es una obra de ciencia ficción en un mundo crepuscular e inhóspito, donde nuestros protagonistas deberán apañárselas para sobrevivir mientras tienen sus propias dudas amorosas y morales. El entorno creado por Martin es, como siempre, muy bueno, y la trama engancha desde las primeras páginas. Veréis más libros de este autor por aquí, ya que me he propuesto leer más libros de Martin. Leí Canción de Hielo y Fuego, y le proclamé como uno de mis escritores favoritos, pero me di cuenta que para ello debería leer más obras suyas, así que Sueño del Fevre pronto estará aquí.



Saludos paganos de Ragnarök.